UNA MIRADA A LA POBREZA


El amor de Dios nos invita a salir de lo que es limitado y no definitivo, nos da valor para trabajar y seguir en busca del bien de todos, aun cuando no se realice inmediatamente, aun cuando lo que consigamos nosotros, las autoridades políticas y los agentes económicos, sea siempre menos de lo que anhelamos.

(Spe Salvi, BENEDICTO XVI, 2007)


Os invitamos a leer la última publicación de Cristianismo y Justicia: “Una mirada a la pobreza. Corazones atentos y que actúan en consecuencia”.